lunes, 5 de diciembre de 2011

Adenda a la Martxa de Saratxo: "Variedad botánica en el Santuario de Nuestra Señora Virgen de la Antigua de Orduña".

La razón de esta adenda a la Martxa de Saratxo 2011 viene motivada por la circunstancia que coincidí con Aintzane (Sorgiñe en Mendimartxak). Así, andando me comentó si sabia que árboles eran "esos dos tan grandes que están en el Santuario de la Virgen de la Antigua de Orduña". Le comenté, cosa que ella ya conocía, que allí está la morera de la Virgen, cuya representación en hormigón está en el Txarlazo.
Los describía como "unos árboles grandísimos parecidos a unos cipreses de Lawson".
Le comenté que cuando acabase la martxa iría a Orduña a ver tan enigmáticos árboles y comentaría lo que viese, en este caso fotografiase.

Así llego al Santuario y lo que procede es entrar en su iglesia, donde se encuentra la talla de la Virgen de la Antigua del s. XIV y patrona de Orduña. Talla realizada en madera de tilo.
Como los tilos y castaños de indias que formando un paseo llegan al Santuario y con un aparcamiento a su lado.



En el exterior se encuentra la morera, que según la tradición es donde aparecio la talla de la virgen a un pastor. Esta morera está catalogada como árbol singular. Detrás el Convento de las Madres Carmelitas.




Otra vista con el frontal de la iglesia.



A partir de aquí se encuentra un amplio jardín que tiene diversos árboles, arbustos y flora.
Los "arboles" que dice Aintzane. Con razón que le llame la atención. Si miramos el de la derecha y lo comparamos con el plátano de sombra de su derecha vemos que es grandísimo.
Pues bien, son secuoyas gigantes (Sequoiadendron giganteum).
La especie viva más grande del mundo, junto con los secuoyas rojos (Secouia sempervirens). Tambien los abetos de douglas lo eran hasta que los más grandes fueron talados.



En la marcha de Aulesti se vieron más secuoyas. Otra imagen desde la carretera.



Ya que estamos curioseamos un poco y se ve alguna otra maravilla como este abeto pinsapo (Abies pinsapo) y cedro llorón o de Himalaya (Cedrus deodara). Izquierda y derecha respectivamente. El que está en el borde derecho de la foto es uno de los secuoyas.



El pinsapo es también imponente. De manera naturalizada se da básicamente en Grazalema.Los que vemos así es que han sido plantados. Una gozada verle de este tamaño fuera de sus lugares de origen.



Sus acículas (hojas) son inconfundibles formando esta maraña.



El cedro del Himalaya tampoco desmerece en vistosidad.



En un sitio tan pequeño se encuentra diversas especies de árboles y algunos de gran tamaño como se ve.
Se puede observar el letal tejo (Taxus baccata).



La mediterranea y también tóxica adelfa (Neriun oleander), una pena que no este florida.



El boj (Buxus balearica).



El acebo (Ilex aquifolium).



Un abedul, viéndole ahora en la foto no me atrevo a decir si es pendula o pubescente.



Un viburno (Viburnum odoratissimum). Con flores es más bonito y las hojas al natural y no en esta foto, son espectaculares.



Aintzane, aquí tienes un ciprés, no es el común, es muy parecido. Es el ciprés de Arizona (Cupressus arizonica).



La pila de la cámara de fotos se estaba acabando desde la mitad de la marcha. A trancas y barrancas voy sacando las fotos, apagando la máquina y encendiéndola para que "se refresque la batería".
Así que con esta última foto despido esta adenda a la Martxa de Saratxo. Es un haya roja (Fagus silvatica atropurpurea). Una delicia visual: hojas rojas y en otoño a un rojo cobrizo pardo.



Se han quedado en el tintero algunas otras especies, pero eso para otra ocasión. El lugar por su historia, variedad botánica en un lugar realmente pequeño y por el porte de sus árboles bien merece una visita, aunque sea breve como la que hice después de una buena mañana de monte.


Imprimir artículo

No hay comentarios:

Publicar un comentario